EL DIAFRAGMA

En Fisioterapia Madrid sabemos que, aunque a rasgos generales podemos saber a qué nos referimos cuando hablamos de él, el diafragma es el gran desconocido de nuestro cuerpo.

El diafragma no es sino un músculo plano situado en el centro del torso. Tiene su origen en las palabras griegas “dia” (en mitad) y “phragma” (valla). Se caracteriza por tener forma de paraguas o paracaídas, aunque en realidad, está formado por dos partes, una con mayor número de fibras musculares y otra más central con fibras tendinosas conocido como centro frénico. Además, tiene tres áreas de inserción ósea: una a nivel de la parte inferior del esternón; una segunda en el borde costal de la 7ª a la 12ª costilla y una tercera en las vértebras lumbares a través de dos pequeñas expansiones llamadas pilares de diafragma.

En cuanto a las utilidades del diafragma, podemos destacar varias, aunque la más conocida es la de ser un músculo principal de la respiración. Al contraerse desciende y aumenta el espacio para dejar entrar aire en los pulmones y comprime las vísceras abdominales. Al relajarse provoca el efecto contrario.

Funciona como el émbolo de una jeringuilla controlando las presiones del abdomen, favoreciendo el retorno venoso y linfático. También ayuda al hígado a vaciarse de sangre y realiza un bombeo sobre todas las vísceras a modo de masaje abdominal. Por otra parte, sirve de sujeción para que las vísceras abdominales tengan puntos de anclaje y se puedan mover.

Aunque parezca extraño, en Fisioterapia Madrid también tratamos complicaciones diafragmáticas, las más habituales son el bloqueo o el mal funcionamiento del mismo y, para ello, existen diversos tratamientos como la ejecución de ejercicios respiratorios para cambiar el patrón respiratorio y hacer que el diafragma se active; tratar de distribuir simétricamente la tensión muscular del diafragma y tratar de liberar, en caso de haberla, la compresión del nervio frénico durante su trayecto desde las cervicales hasta los órganos que están por encima y por debajo de él. Es importante prestar atención al diafragma pues, una complicación puede causarnos lumbalgias, congestión venosa, alteraciones posturales o rigidez en la columna.